Paseo sentimental
Dardaba el poniente sus rayos supremos
y el viento mecía los blancos nenúfares,
los grandes nenúfares entre los juncales
que en las quietas aguas tristemente lucen.
Solitario erraba, paseando mi herida
junto del estanque, entre la enramada
en donde la bruma vaga evocar suele
un desesperante y grande fantasma,
Que, triste, lloraba con la misma voz
con que las saucedas entre sí se llaman
entre la arboleda por donde yo iba
llevando mi herida toda ensangrentada.
Y el denso sudario de tanta tiniebla
vino a ahogar los rayos de sus ondas pálidas,
y están los nenúfares entre los juncales,
los grandes nenúfares sobre quietas aguas.
y el viento mecía los blancos nenúfares,
los grandes nenúfares entre los juncales
que en las quietas aguas tristemente lucen.
Solitario erraba, paseando mi herida
junto del estanque, entre la enramada
en donde la bruma vaga evocar suele
un desesperante y grande fantasma,
Que, triste, lloraba con la misma voz
con que las saucedas entre sí se llaman
entre la arboleda por donde yo iba
llevando mi herida toda ensangrentada.
Y el denso sudario de tanta tiniebla
vino a ahogar los rayos de sus ondas pálidas,
y están los nenúfares entre los juncales,
los grandes nenúfares sobre quietas aguas.
Paul Verlaine
Comentarios
Dolor y pena triste y vieja.
Un abrazo
Un abrazo.