Vals del atardecer


Los pianos golpean con sus colas
 enjambres de violines y de violas.
 Es el vals de las solas
y solteras,
 el vals de las muchachas casaderas,
 que arrebata por rachas
 su corazón raído de muchachas.

 A dónde llevará esa leve brisa,
 a qué jardín con luna esa sumisa
 corriente
 que gira de repente
 desatando en sus vueltas
 doradas cabelleras, ahora sueltas,
 borrosas, imprecisas
en el río de música y metralla
 que es un vals cuando estalla
 sus trompetas.


 Todavía inquietas,
 vuelan las flautas hacia el cordelaje
 de las arpas ancladas en la orilla
donde los violoncelos se han dormido.

 Los oboes apagan el paisaje.
 Las muchachas se apean en sus sillas,
 se arreglan el vestido
 con manos presurosas y sencillas,
 y van a los lavabos, como después de un viaje.

Ángel González

Comentarios

Marcos ha dicho que…
Los bailes populares de las muchachas casaderas, marcaban una época preciosa.
Chelo ha dicho que…
Y lo bien que describe Ángel González esos bailes que con tantas "s" parece que hasta oimos las música y entran ganas de bailar.

Tengo ahora mismo entre mis lecturas una antologia de éste poeta
Un abrazo.
ana porras ha dicho que…
Hola Meme.
Me ha encantado pasar por tu blog y encontrar juntos a estos dos maravillosos astros, Renoir en la pintura y Angel González en el poema.
Un abrazo
Olegario ha dicho que…
Magnífico tu poema del "Vals del atardecer. Hoy quizás fuera del anochecer. Qué tiempos aquellos. Un fuerte abrazo.
omar enletrasarte ha dicho que…
muy bueno, saludos
Meme ha dicho que…
Muchas gracias por vuestros comentarios. Como veis en mi nueva entrada, me voy de viaje.

Abrazos y hasta la vuelta

Entradas populares de este blog

Oda a la bella desnuda

El ruego del libro

Tristeza de verano